
Buf. No creo que exista ningún calificativo que la defina perfectamente, pero creo que el más apropiado sería bizarra.
La película en sí no hay por donde cogerla, pero partiendo de su misma base, dado que el argumento gira al rededor de dos familias que compiten por ser la más inmunda del mundo y tengo que asumir que, verdaderamente, hacen logros por ello.
La historia la protagoniza (creo) un travesti (o un transexual, prefiero no saberlo, la verdad) llamado Divine, su depravado hijo (el cual no vacila en intentar introducir gallinas en las chicas a las que se beneficia), una mujer (la Srta. Cotton) que no parece guardar parentesco con la familia y la madre de Divine, una mujer bastante rellenita adicta a los huevos que vive en una cuna. O más bien en una de esas jaulas donde se encierran a los niños pequeños.
La película se centra básicamente en las gilipolleces de los protagonistas (como ver al travelo cagar en la calle, chuparle la minga a su hijo -con todo lujo de detalles- o comerse un fiordo de perro recién salido del horno -por citar solamente algunas de las proezas de la [¿el? ¿¿lo??] principal '"-¿estrella?-"' del reparto-)
Puedo garantizaros con toda seguridad que la calidad de la misma es bastante pareja a otra que he visto hace poco: Zombis Paletos.
Y la pondría nota, pero aún sigo demasiado anonadado.
PD: Estoy segurisimo que esta película a Pazita la va a chiflar.