Dolorcín escribió:Es que tú y yo somos muy diferentes. A ti te encanta agarrar la bandera y lanzarte a pecho descubierto seguido por todos tus pupilos. A mí en cambio me encanta hacer que otro agarre la bandera, pensando que lo hace por propio convencimiento y se lance a pecho descubierto mientras yo lo jaleo desde la retaguardia.
Con los frikones de ese juego, me hubiese quedado solo con la bandera corriendo hacia los galos. Había que darles un discurso digno de Cicerón cada vez que tocaba que moviesen el culo. La mayoría no hacía más que decir que había que fusionar alianzas una y otra vez hasta crear una especie de Rumasa del Travian, y, sobre todo, quejarse.
Eso sí, a los más gilipollitas les daba un cargo, y aquello era mano de santo... me sentía como Zapatero repartiendo ministerios a los Bonos del lugar.
Hazme caso: deberías experimentar la "erótica del poder". Cuando uno lleva la hoja de laurel, todo lo que dicxe y hace adquiere una dimensión cuasi-mística. Era decir "por la Alianza" y los muy mongolos se ponían a aplaudir con las orejas.
BarBara escribió:Nicotin escribió:Aquí donde lo ves, el señorito fue Imperator levantando desde cero una alianza fuerte que atacaba con frenesí psicótico a cualquiera que nos tocase los cojones.
Perdona Marlon Brandon, pero la que levantó la alianza fui yo. Y te dejé ser Imperator porque lo de Decanus Facultas sonaba a médico esquizofrénico y no te gustaba.
¿Que me dejaste ser "Imperator"? Pero si no sabías ni cómo se decía "emperatriz" en latín. ¿Y quién ponía firmes a los frikones cada vez que querían dar un golpe de estado? ¿Quién les insuflaba furor patriótico cuando se ponían histeriquitos? ¿Quién se subía a la tarima a anonadarles con su elocuencia?
PD: "Brandon" es el de "Sensación de vivir", so lerda.