Musica de la buena

[Igor]

Caminaron por el campo en una apacible tarde de verano. El sol relucia en sus caras y sus cabellos se dejaban acariciar por la suave brisa. Decidieron sacarse los zapatos y deslizarse descalzos por la fresca hierba hasta caer rendidos sobre ella. Miraron al cielo, mientras sus cuerpos se restregaban. Eran piel contra piel animandose mutuamente a entregarse a una compartida desnudez recubierta de deseo y de lujuria. La pasion seria la mejor de las meriendas, mientras se olvidaban de la frias mañanas y la oscuridad de las noches en vela. Solo el atardecer para dar rienda suelta a lo que se les pasase por la cabeza.

Los brazos y las piernas a modo de cuerdas con las que enredarse prestos a la jodienda. Atrapados en robadas caricias y manos traicioneras a la par de fieles compañeras de lo que demandaban con ansiedad sus respectivas entrepiernas. Una melena larga como el anuncio de la llegada de la primavera, significo el principio del fin de todo lo que quisieran. Roces de esos que podrian provocar un incendio en plena foresta. Gemidos que alertaban a los pajaros de que por alli se mascaba la tragedia. Y retumbo la tierra bajo sus posaderas aferrados a la necesidad de fundirse con ella y tambien sobre ella.

Cuando llego el momento de recuperar fuerzas, se limitaron a continuar abrazados hasta la hora en que sus rostros repletos de satisfaccion y felicidad, fuesen iluminados por las primeras estrellas...

[Igor]

Las luces ya se iban apagando a su paso, y su reflejo se podia adivinar en los charcos que iban sorteando mientras trataban al mismo tiempo de no soltarse las manos. Algunas lagrimas se caian de sus mejillas junto al silencio que solo se rompia por el imperceptible sonido que provocaban al contribuir a llenarlos. Las palabras no fluian como otras veces, la saliva se iba tambien acumulando. Momentos de rechazo a dejar que los dedos no continuasen entrelazados. Los ojos clavados.

Cuando con su mano trato de acariciarla, fue como si le cayese encima una especie de rayo atraido por la electricidad estatica que emanaban ambos. Ese rayo, perforo el corazon del que se quedo mirando como se alejaba. Aquella perfecta silueta que tanto veneraba y que tantas veces deseo atrapar para siempre bajo alguna calida manta.

Pero su destino estaba marcado desde quien sabia cuando. Al menos podria regresar siempre en sus recuerdos a aquellos momentos en que no parecia transcurrir el tiempo. Eso probablemente fue lo que penso cuando tambien giro su cuello, y con el, todo el resto de su cuerpo. Sabia que seria lo unico que quedaria cuando las palabras se las llevase el viento...

[Igor]

Ella conducia a toda velocidad sin saber muy bien que direccion llevar, eso era lo de menos en aquellos dificiles momentos. El se encontraba haciendo dedo, con el dedo bien levantado, y aquellos pantalones vaqueros marcando el considerable tamaño de su miembro. A pesar de que ya estaba oscureciendo, no le fue dificil gracias a las luces delanteras comprobar a semejante semental luciendo cuerpo. Y por supuesto freno en seco. Le pregunto hacia donde dirigia sus huesos, y el le respondio que hacia cualquier rincon en que ella le permitiese saborear sus senos, acariciar su trasero y ya de paso, ir templandole el sexo precisamente con el dedo con el que habia estado haciendo dedo. En realidad lo tenia reservado para eso. Apenas unos instantes antes presintio que una mujer pasaria por alli para compartir juntos el trayecto hacia el deseo. Y asi fue, la puerta del copiloto se abrio y tras ella tambien una pierna. Se quedaron follando primero dentro del coche, y acto seguido continuaron sobre la carretera. El contacto del solido asfalto no fue impedimento porque lo derritieron entre embestidas animalescas. Los puntos que le quitaron a ella del carnet, los recupero despues cuando le cosieron el ojo del culo despues de catar semejante verga...

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[Igor]

Le resultaba jodido llegar a casa y tener que soportar sus tipicos reproches, que si te dije que no te olvidases de ir al super, que si deberia darte verguenza que yo me tenga que encargar de hacerlo todo, que si eres un puto inmaduro sin aspiraciones, que si yo nunca sere tu segunda madre, que maldito el dia en que no le hice caso a mis padres.

Pero tener que ir a cagar pedos al balcon no formaba parte de sus multiples rituales. Ni levantar siempre la tapa para mear por falta de destreza al apuntar. Ella ya nunca queria que juntos se duchasen, probablemente no solo por las prisas sino porque tambien el era de los que preferian ducharse tarde y ya de paso enjabonarle el culo para el cipote a traicion poder clavarle.

Aunque a veces, solo a veces, en esas noches frias en que todo parece silenciarse, aun podia sentir un pie acariciandole o un susurro al oido diciendole que hacia demasiado tiempo que no la abrazaba ni le restregaba el rabo entre los muslos al acostarse como antes...

[Igor]

Ser un tipo bastante alto le ayudaba algo, pero tampoco hacia milagros. Ya se sabe que las chatis sienten una atraccion especial por los chulos de discoteca y los guaperas, y el era mas bien de los que montaban el show como los monos de feria. Siempre se repetia mas o menos la misma historia, entraban varios colegas en manada iberica prestos a regar los gaznates en la barra, mientras iban viendo pasar el resto del ganado por si alguna buena potra andaba suelta. Dificil era, pues en todo caso solian andar en pareja, tal vez como medio de proteccion, porque hasta los callos no solian verse sueltos como no fuera cuando a las guapas les llegaba la hora de subir a la parte de arriba para dejarse sobar un poco el culo, el potorro y las tetas.

Curiosos lugares aquellos sobre todo en las discotecas de pueblo, porque con tantos hevyrulos sueltos, habia que andarse con ojo de no soltarle algun piropo a la chorba de alguno de ellos. Y ademas estaban tambien los charcos de basos de cubata tirados por el suelo, como para resbalar y caerse sobre algun conejo prieto estaba el gallinero.

Pero desde alli era un lugar privilegiado para divisar carne fresca, como los buitres leonados cuando ven que alguna cria se ha quedado rezagada, y en los momentos en que mas aprieta el hambre, se aventuran incluso a soltar las garras aunque todavia se pudiese resistir la presa. Alli la vio, alta y esbelta, de cerca de metro ochenta, sin duda alguna una potente hembra. Pero, como seria posible que aquel selecto especimen anduviese suelto y sin correa. Seguramente algun herculeo maromo la estuviese custodiando a pesar del momento de relajo, o alguna compañera de travesia que estaria por alli sin apenas dar señales de vida.

Era su momento, penso, debia de arriesgarse, pero como lanzarse directamente desde cierta altura podia suponer un grave riesgo para su integridad fisica, decidio bajar primero a toda prisa las escaleras. Por miedo evidentemente a que aquella vision se convirtiese al cabo de unos segundos en un espejismo pajeril de tantas y tantas noches de regreso entre resacas y demas cagadas. Seguia alli, solitaria como una sirena de las que enloquecerian a cualquier marino encerrado en un buque sin probar mujer desde que al menos una odisea completa hubiese transcurrido. Y de perdidos al rio...

¿Gastas pista? Me has hecho reir garrulo, asi que agarrame de la cintura pero ojito con tratar de sobarme el culo. Maravillosa sensacion, ¿el que? (ella pregunto). Sentir por primera vez las tetas al mismo nivel, (respondio el). Se levanto del suelo un rodillazo en los huevos y una hostia despues. Si, la habia cagado otra vez, que se le iba a hacer...

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[Igor]

Con la nevera vacia desde hacia semanas, no le quedo otro remedio que entrar en el supermercado, duro trance para un asocial declarado. Como era muy macho, no gustaba de ir tirando de carrito, preferia por eso ir cargado entre los pasillos de patatas fritas y la seccion de congelados. Precisamente en la zona de los tres delicias, diviso la cuarta en forma de culo de tia. Se encontraba convenientemente inclinada mirando algo. Pantalon vaquero azul claro, perfecta definicion de la raja del culo entre un buen par de muslos. Chaquetilla de esas finas de tela ceñida a una cintura agil cual gacela. Por fuerza tenia tambien que estar provista de un cojonudo par de tetas. De repente, cerro los ojos y experimento una vision, en ella se acercaba hasta pegarle todo el paquete por detras. Oye chaval, que haces, pero tu de que coño vas. Del tuyo si me lo das, pero me conformaria con que me dejases quedarme asi pegadito a ti solo un ratito mas. Bueno, pero por lo menos avisame para cuando pueda continuar comprando, que he visto por ahi una oferta en chorizos de cantimpalo...

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[Infanta]

Me encanta este hilo. Se ve que eres un hombre extremadamente sensible y que necesitas compañía...


No pares por favor...

[Igor]

Asi es, pero le advierto que ya hace tiempo que deje de buscar mujeres etilicas con las que satisfacer mi necesidades mas intrinsecas. La manivela tambien puede ser una fiel y leal compañera...

[Criadillas]

Cojonudo.

No ha hecho más que llegar el mongolo nuevo y ya ha ligado.

Veros a la mierda, mujeras.

[Infanta]

Encima, pues si pasáis de mí.




Aigor, yo sólo bebo fantita y poco más, pero vamos, no le vayas diciendo eso de que son etílicas a las tías que vengan porque el que parece que se bebe todo lo que pilla eres tú...

Y zumba tu manivela, pero podrías tener un poco de tacto...


¡Pues ya no te dejo ninguna canción!