Dolordebarriga escribió:Más que por la puta cara, creo que éste tio ha llegado a estrella porque es de los mejores actores que existen ahora en el mundo mundial. En Magnolia, representa un papel absolutamente soso, el de enfermero buenazo de un moribundo plasta cuyo hijo es una especie de gurú sexual. Los otros dos papeles son dos bombonazos de la ostia para un actor;y además en este caso tanto Jason Robards (el moribundo), como Tom Cruise (el gurú) lo hacen de maravilla. Pues bien, aún así, en cada una de las escenas que comparten con Philip Seymour este se los merienda con patatas, pese a limitarse a interpretar su papel de no hacer casi nada. (A Juliane Moore no, porque ella también tiene uno de los mejores papeles de su vida y la japuta lo borda)
Querido DDB:
Estoy de acuerdo en todo lo que dices en tu post. Yo me rendí al susodicho desde que le vi en Boogie Nights, y después de Happiness a punto estuve de tatuarme su semblante sobre mi hercúleo pecho izquierdo. Lo que quería decir, y esto no me lo negarás, es que el menda tenía papeletas y físico para no pasar de ser un secundario de oro, y que Hollywood, de tanto en cuando, concede la gracia a alguno de ellos de saltar a la cabeza de los carteles. Y esto generalmente lo hace con un Oscar (una nominación a secas rara vez funciona) al mejor actor/actriz principal. Son más frecuentes los casos en los que esto sucede con féminas, y pondría ejemplos si no estuviera de resaca y no me diera tanta pereza ponerme a pensar.
Bueno, sí, allá van dos: Charlize Theron y Renee Zellweger. Vale que las dos son bastante competentes y la primera está más que follable, ¿pero merecían los oscars que les dieron?
Yo me quedo con otros proyectos de encumbramiento vía nominación que finalmente no cuajaron: Mira Sorbino (a esta se lo dieron, y... ¡flum!) y, sobre todo, Lena Ollin, caída en desgracia después de "Enemigos, una historia de amor" y "La insoportable levedad del ser".
Que sí, que sí, que ninguna de estas tenía madera de secundaria. Quería ilustrar cómo Hollywood intenta consolidar ciertos nombres todos los años allá por marzo.
Volviendo a Philip Seymour Hoffman, con lo de "por la puta cara" me refería a que, al margen de sus méritos, este salto de caché a veces parece depender de la buena fortuna, de un representante espabilao, de un papel redentor que parecía estar escrito expresamente para él/ella, etc. Méritos y coña. Que sí, que en este caso coinciden las dos cosas. Ahora sólo falta que sigan escribiendo papeles protagonistas para alguien con su físico.
Tú, tengo una fotico posando desnudo a lo maja sobre el órgano de la catedral de Albacete, si quieres te la cuelgo en el fosphorito y me dices que tal me queda el pelo
Como la foca sodomita que sacó Bertolucci en El Cielo Protector, ya te lo digo. No es preciso que cuelgues nada.