Supuestamente el partido contra los lituanos de Alcalá es dentro de 20 horas...
y de seguro nos van a dejar el cacas como el cañón del colorado, así que tampoco os peleéis por jugar.
¡¡Ramón!!
¡¡Qué te han pintado la cara en el tercer cuarto!!
En el descanso me bebí de un tirón el container del gatorade con siete octavos de absenta pura... y un saco de cal viva también, mientras mis queridos compañeros hacían una análisis profundo del partido a gritos de BEBE BEBE BEBE BEBE, y vestían camisetas de la universidad Complutense de Puerto Urraco... y creo que había un pollo, putas y un transfuncionador del continuo...
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Vale, para la próxima me curraré una excusa mejor.
Sea como fuere, la victoría fue vengativa y gloriosa y digna de ser contada por un bardo en el siglo XII puesto de meth hasta el culo
