irichc escribió:Razonéis o no, estáis a mi merced.
Deseo hacerte el amor lentamente en un campo de amapolas.
}:-D
irichc escribió:yende escribió:Puestos a quotear canciones os dejo una del "genio" Albert Pla, cancion del disco "Veintegenarios en Alburquerque". Para ti querido irichc con que leas la negrita tendras bastante...
Por fin alguien se ocupa del tema del hilo. Y con un sofisma que le estalla en las manos. En efecto: Es tan supersticioso deducir de la concurrencia de hechos que el sol sale porque canta el gallo, como hacer lo propio con la extinción (definitiva) de la personalidad y la muerte del cuerpo, causa ésta y efecto aquélla.
Pepe escribió: A mi todo esto (la extinción del lince) me parece una mierda. El lince mola, es bonito como gato y elegante como abrigo, que se vaya a la mierda no mola, que hagan corridas de linces.
yende escribió:Jejejejejejeje, este tio es el descojone, si sabeis de algun circo de tres al cuarto mandarle las referencias. Su hija lo agradecera.
Puestos a quotear canciones os dejo una del "genio" Albert Pla, cancion del disco "Veintegenarios en Alburquerque". Para ti querido irichc con que leas la negrita tendras bastante...Albert Pla - El Gallo Eduardo Montenegro escribió:los pajaritos cantan las nubes se levantan
...
creer que se detendrían porque un gallo
padeciera una afonía eso era una tontería
como esa que algunos hombres creen
que viven eternamente
que su alma sube al cielo
aunque su cuerpo haya muerto
como si en el firmamento
hubiera sitio para tantos
san se acabó
lo único que sube al cielo son los pedos
que se tiran los gusanos cuando comen sus despojos
...
... aunque sinceramente, no creo que captes tan sutiles ironias.
The last samurai escribió:irichc escribió:The last samurai escribió:Me parece mucho más loable el cura que te intenta camelar con buenas palabras y con peticiones de actos de fe, que el que intenta defender sus razonamientos mediante jugadas semánticas rocambolescas
Cuanto más incierto sea aquello que te amenaza, más fácil resulta negarlo. Hay que conservar, sin embargo, algún grado de incertidumbre para que la fidelidad quede premiada.
No sé si te he entendido ahí, pero si quieres decir que en tus discursitos de monaguillo dejas siempre la puerta abierta a la fe por lo que pudiera pensar el vecino de arriba, mal vamos.
Pero será eso, que no te he entendido bien. Suele pasar cuando se habla para uno mismo y no para que te escuchen.
La guía del autoestopista galáctico escribió:El pez Babel es pequeño, amarillo, parece una sanguijuela y es la criatura más rara del Universo. Se alimenta de la energía de las ondas cerebrales que recibe no del que lo lleva, sino de los que están a su alrededor. Absorbe todas las frecuencias mentales inconscientes de dicha energía de las ondas cerebrales para nutrirse de ellas. Entonces, excreta en la mente del que lo lleva una matriz telepática formada de la combinación de las frecuencias del pensamiento consciente con señales nerviosas obtenidas de los centros del lenguaje del cerebro que las ha suministrado. El resultado práctico de todo esto, es que si uno se introduce un pez
Babel en el oído, puede entender al instante todo lo que se diga en cualquier lenguaje.
Las formas lingüísticas que se oyen en realidad, descifran la matriz de la onda cerebral introducida en la mente por el pez Babel.
»Pero es una coincidencia extrañamente improbable el hecho de que algo tan impresionantemente útil pueda haber evolucionado por pura casualidad, y algunos pensadores han decidido considerarlo como la prueba definitiva e irrefutable de la no existencia de Dios.
»Su argumento es más o menos el siguiente: «Me niego a demostrar que existo», dice
Dios, «porque la demostración anula la fe, y sin fe no soy nada».
»«Pero», dice el hombre, «el pez Babel te delata, ¿no es así? No puede haber evolucionado al azar. Demuestra que existes, y por lo tanto, según tus propios argumentos, Tu no existes. Quod erat demonstrandum».
»« ¡Caray!», dice Dios, «no había pensado en eso», y súbitamente desaparece en un soplo de lógica.
»«Bueno, eso fue fácil», dice el hombre, que vuelve a hacer lo mismo para demostrar que lo negro es blanco y resulta muerto en el siguiente cruce peatonal.
»La mayoría de los principales teólogos afirma que tal argumento es un montón de patrañas, pero eso no impidió que Oolon Colluphid hiciese una pequeña fortuna al utilizarlo como tema central de su libro Todo lo que le hace callar a Dios, que fue un éxito de ventas.
»Entretanto, el pobre pez Babel, al derribar eficazmente todas las barreras de comunicación entre las diferentes razas y culturas, ha producido más guerras y más sangre que ninguna otra cosa en la historia de la creación.»