Ha faltado Arsene Wenger escondido entre los coches del fondo pedobear style.
De todas formas ha tenido suerte el chaval de nacer en Japón donde los niños son unos pánfilos que casi le hacen la genuflexión antes de intentar quitarle el balón, lo mismo aquí ya llevaba a su edad seis fracturas de tobillo y quince esguinces de mandíbula, la mayoría provocadas por sus propios compañeros.
Ajolá pase algo que me engorde de pronto/ Un alud de tocino, un camión de merengue/ Ajolá por lo menos que me rapte Falete/ Para así comer tanto, para así comer siempre/ De todas las pancetas, de todos los jamones/ Ajolá que no pueda ni verme los cojones. - Salivo Rodrïguez.