pH, más que hamor, frensi.

En el mio, iba en un coche con dos de mis mejores amigos. Mi amiga M., siempre una persona modosa, recatada y reservada, de repente se ponía tonta, me cogía por la cara y me besaba. Pero era un beso de coña, muy forzado, incómodo. Era eterno, la muchacha no se despegaba de mi boca, me apretaba contra ella, mientras se reía.

En mi mano sujetaba su cámara digital, enfocando hacia nosotros, pero por lo visto su papel era irrelevante en el sueño.

Siempre he pensado que lo más importante para interpretar un sueño es cómo te hace sentir cada cosa que en él sucede.

En este no sabía cómo sentirme. Sorprendido, confundido... Que mi amiga -esa que rehuye las conversaciones sobre sexo y amor- me de un beso así, de buenas a primera, en plan de chonga, es tan probable como que yo vaya alguna vez a la Central.

¿Y tú? ¿Cuál fue tu último sueño? Compártelo, no seas mojigat@.

Oruga, bonita iniciativa pero si no se sigue quizá es por una cosilla que suele pasar con los sueños: al que los sueña le parecen lo más chachi del mundo mundial pero al resto de humanidad, en general, los sueños de los otros (les)(nos)( me) parecen un taladro tamaño XXXL.


Soñabaaaa, que vendía mi alma al diablo...

Oruga escribió:¿Y tú? ¿Cuál fue tu último sueño? Compártelo, no seas mojigat@.

No sueño.

Y cuando sueño siempre tengo el mismo sueño.

He perdido el coche.

Tengo que cruzar ciudades enteras andando a horas de lo más raras para encontrar el coche.

A prisa porque algo o alguien está por esperar.

Y me despierto con la angustia que se pierde al minuto de saber que es un sueño y que el coche está donde debe de estar.

Para esto mejor no soñar, porque soñar siempre que uno pierde el coche y debe recuperarlo es además de angustioso, cansino.

Y para colmo usted no tiene coche ni sabe conducir ni nada.

Ahí le ha dado.

Es como soñar con tener un harén de mozas morunas para mi enterico y al despertar darse cuenta de que uno es tán maricón como Urdu.

Son las cosas que tienen los sueños.

El moro.

PD: El ejemplo anteriormente expuesto bien lo podría firmar DdB que anda en una fase de reafirmación de su dudosa sexualidad.

Desde la infancia he tenido un sueño recurrente: mi padre para el coche y se baja a hacer cualquier recado. Yo me siento a jugar en el asiento del conductor y lo arranco sin querer. Tengo que estar conduciéndolo durante un buen rato, presa del pánico, hasta que me salgo por la cuneta y me estrello contra un árbol. También vale una valla.

Y yo de pequeño tampoco sabía conducir, fíjate...

Yo soñé algo parecido pero con distinto final mi padre para el coche y baja para hacer cualquier recado, de repente empiezan a entrar hombres y me tocan la cosita de ahí abajo, yo les digo que es mi gusiluz y que no se toca, pero ellos no hacen caso y luego hacen otras cosas, pero como ya he dicho y me dijo mi sicólogo sólo era un sueño.

Esta noche no he soñado.

O al menos no me acuerdo.

Solo quería que se quedaran tranquilos, que no he tenido que buscar mi coche.

En mi último sueño unos niños gitanos mejicanos me mangaban la cámara digital y el minidisc a punta de navaja (pequeña), mientras nos rodeaba todo el cuerpo de baile de U.P.A. en una orgiástica mezcla de danza tribal y lisérgicos contoneos.

Y no salía Lorenzo Sanz Jr.

Yo he soñado que estaba en medio de una manifestación en el Madison Square Garden en la que apedreaban a Ibarretxe (que estaba subido a un globo aerostático que volaba bajito) por pedir la independencia del País Vasco.

Después había otra escena en la que Ibarretxe hacía footing perseguido por una manada de manifestantes a través del Central Park y yo le perseguía. El hijoputa está en forma. Estoy sin aliento.