Creo (con pena), que no es tu tipo de juego. Creo. Espero equivocarme.
Si el rollo japo te da un poco igual, y la parte social, de quedar con los amigos, de gestionar las 2 acciones que, en general puedes hacer cada día (p.ej. después de clase ir a estudiar con un compi para subir la estadística de Conocimiento y no catear en los exámenes de junio y luego por la noche ir a un club de jazz con una amiga a hacerte el guayón y subir afinidad con ella), de los minijuegos largos y tal... la parte de asalto a Palacios y combate, se te va a quedar corta. Entre Palacio y Palacio puede haber fácil 5-8 horas de juego social, o mucho más si eres de liarte con estas cosas. Y eso no es para todos.
Pero pruébalo, porque a lo mejor por los ojos sí te entra, y el carisma que destila todo (¡los menús!) y la historia y personajes te engancha.
Estando grati en Game Pass, dale un tiento a ver.
Por cierto, que tienes el juego del Justin Roiland y por lo viste es bastante divertido.
Yo también estas semanas he jugado a:
LEGO Harry Potter Collection.
Y como juego de LEGO no es de los mejores, la verdad. Alienante, repetitivo y escaso en mecánicas y laaaaaargo si haces como yo, y te juegas los 7 capítulos del tirón (que son como unas 30 horas o así en total, puede que más).
Mucho mejor jugarlo a dobles, por supuesto.
Merece la pena, eso sí, para el que sea fan de Harry Potter (yo no lo soy). Te cuenta fielmente la historia y al contar con los derechos de las pelis, la increible banda sonora de Williams está presente y encaja como un guante.
Me los terminé porque no aguanto dejar los juegos a medias, porque estaba gratis en Essential y porque no tenía nada mejor que jugar, la verdad, pero salvo que seas un fans potteriano, o tengas a alguien con quien echarte las partidas en local, o un ultrafán de los juegos de LEGO, not recommended.
Un 5 pelao.
Dishonored 2.
En Black Friday lo pusieron a 2,99 en la store, y como el primero me gustó, pues dije: PALANTE.
Y fue buena idea.
En líneas generales es primo hermano de su precuela: misiones en las que tienes como objetivo "neutralizar" a uno o varios hijueputas que te han traicionado/atacado y para los cuales puedes usar la fuerza bruta o un más profundo y divertido sistema de sigilo apoyado o no (esta opción te la dan al principio del juego) de poderes sobrenaturales que te son transferidos si lo deseas.
Yo, que no me quería complicar mucho la historia, elegí tener poderes que, al ser la mayoría heredados del primer juego, sabía que me iban a hacer disfrutar más de la experiencia, porque hay que reconocer que tanto el Guiño como la Posesión, como el convertirte en Sombra... son francamente divertidos de usar.
Así que a los buenos de Arkane les ha salido de nuevo un juego sólido, con alguna nueva idea interesante (el poder elegir entre usar un personaje u otro, algún poder nuevo curiosón...) y sobre todo con dos diseños de niveles que son una puñetera gozada y del que tendrían que tomar nota y aprender otros estudios: La Mansión Mecánica (con una cantidad muy divertida y loca de recovecos, secretos y opciones para completarla) y la Mansión Stilton (con puzzles basados en viajes en el tiempo).
Me ha gustado muncho y me han dado ganas de seguir jugando a los jueguicos de estos mochachos. Ahora tocaría el afamado Deathloop, pero quiero dejar tiempo porque al final ir tanto en sigilo me acaba empachando y necesito refrescar mecánicas con cosas más directas.
Un 8. Un gusto para los fanses del sigilo. Limitado o directamente flojo para los que quieran acción pandiloca.
Alan Wake Remastered.
Soy ultrafán de los Silent Hill (de los cuales este juego bebe a morro).
Soy ultrafán de ver jugar a mi mojer o a streamers a juegos de terror.
Pero en general, no soy muy fan de jugarlos yo mismo.
Este Alan Wake siempre me ha llamado la atención por la buena fama que arrastraba desde que salió como exclusivo en su día para X Box.
Aprovechando que lo han reeditado remasterizado para el resto de plataformas... la decisión de hacerse con él estaba clarísima.
Y la experiencia final ha ido de menos a más.
Como juego, no es que haya quedado muy viejo, pero sí que tiene poquitas mecánicas para lo que se estila hoy día en el género (todas bien paridas, también es cierto, lo cual muchas veces es hasta conveniente).
Aquí encarnas a Alan Wake, un escritor de novelas de misterio y terror uberfamoso mundialmente (una especie de Stephen King de 30 y pocos, vamos) que se ha ido de vacaciones con su mujer a un hermoso resort en Maine, y que pronto deberá luchar contra unas fuerzas oscuras que atacan el lugar, y que encima parecen haber secuestrado a la parienta.
Para ello, tocará hacerse con una linterna a pilas, todas las armas de fuego y munición que podamos recopilar, y muchas, muchas ganas de patear por bosques, lagos, granjas, minas, poblachos abandonados y no tanto.
La luz es esencial. Los enemigos siempre tienen una especie de coraza que los hace indestructibles, y solamente tras la exposición de x tiempo a la luz directa, no se volverán vulnerables a nuestros ataques. Así que la mecánica es clara: la luz es la vida. Nos vale la linterna, focos diseminados por aquí y por allá que habrá que dar vida con generadores eléctricos, farolas, bengalas... todo vale y es necesario.
La idea es guay y el juego la aprovecha de muchas y variadas y divertidas maneras, provocando situaciones intensas y de agobio más que de miedo, que harán disfrutar a cualquier jugador al que le vaya este estilo de juego (todo el juego es un shooter en tercera persona, por cierto).
El carácter literalmente episódico del juego es también parte de la mecánica. Cuando acabes un episodio o capítulo, todo tu inventario desaparece (creo recordar que siempre por motivos narrativos más o menos bien traidos) y toca empezar de nuevo a recopilar, lo cual hace la exploración absolutamente esencial si se quiere llegar lejos. También esto hace que seamos menos ratas a la hora de usar recursos. Sabes que todo lo encontrado lo vas a perdes, así que mejor usarlo y disfrutar, porque hay armas y recursos muy, muy molones, la verdad y vistosos.
Hay otro punto otro punto fortísimo además de su mecánica base: la gente de Remedy le ha puesto un mimo y sobre todo una Personalidad así, en mayúsculas.
Continuamente te vas encontrando referencias a la cultura pop del misterio, la weird fiction, a series como Expediente X, tropos clásicos de todo este tipo de género. Para el fan, es una chocolatina muy gustosa de tragar. Y, pese al género, continuamente te vas a encontrar un poco sutil sentido del humor ya sea en detalles ambientales, o directamente en personajes creados explícitamente como alivio cómico (mención especial para el anormal de Barry Wheeler, tu editor, amigo del alma y sobretodo mayor interesado en que salgas vivo para seguir ganando millones con tus libros: un amor de hombre).
Mención especial para su banda sonora, que tiene temazos acojonantes de dioses como Orbison, Bowie o los Depeche. Cojonuda.
Un 8,5.
Me ha gustado mucho. Y ganazas de que salga el 2 a ser posible también en PS para los Viejoratas como yo, y este año.