Less – Andrew Sean Greer
Pues va de que Arthur Less, escritor gay crepuscular en horas bajas a las puertas de su cincuenta cumpleaños, recibe la invitación de boda de su ex y para evitar el incómodo momento sin tener que rechazar de plano la invitación encuentra la manera de encadenar una serie de bolos por los cinco continentes y así poder contestar sin mentir que en esas fechas estará ocupado y no podrá asistir.
Una novela bastante guay, muy meta, con un protagonista de falso perfil bajo encantador a su manera que da mucho juego. No es para todo el mundo pero es buen libro. Le dieron el Pulitzer hará dos o tres años, que igual parece demasiado premio para un libro con un tono deliberadamente menor pero no es menos cierto que al lado de otros libros premiados de perfil alto brilla con fulgores indelebles.
Fugitiva y Reina – Violaine Huisman
Pues el relato de una hija sobre una madre que muy bien de lo suyo no estaba. De ahí en adelante pues un poco lo que quiera el lector en función de su capacidad de empatía y a quién dirija esa empatía. Se supone que está basado en la vida de la autora. Me ha parecido que la segunda parte del libro funcionaba sólo regular. A Molinos le gustó aunque podría haber hecho una reseña con muchos pamplonas sin ningún problema. Bajo vuestra responsabilidad.
Era más grande el muerto – Luis Miguel Rivas
Un chavalillo adolescente de una pequeña ciudad colombiana quiere molar y para molar necesita tener un poco de presencia y para tener un poco de presencia pues ropa pintona de la que llevan los adolescentes que molan pero como no maneja plata pues ahí está, atrapado en un limbo para nada satisfactorio. Total que accidentalmente se da cuenta de que la manera más asequible de conseguir un outfit en condiciones es comprar en el mercado negro ropa de segunda mano de sicarios al servicio de los señores del crimen caídos en acto de servicio, ropa de muerto, que pichicateando un poco los agujeros de bala y lavando la sangre da el pego bastante bien. Pero molar, pues tiene sus riesgos, cómo no.
Pues arranca muy bien, con un planteamiento potente de inicio y unos giros muy inquietantes y malrrolleros en plan esto pide que resucite Buñuel y lo ruede, para pasar poco a poco a terrenos más convencionales, una serie de narcos, para acabar en un culebrón, lo que no es necesariamente malo pero deja un poco la sensación de que al final pierde un poco de fuelle. Divertido, muy pasapáginas y con el plus del lenguaje coloquial colombiano. Buenos personajes, buena ambientación, buen ritmo. Un tío a seguir Luis Miguel Rivas.
La Vida Verdadera – Adeline Dieudonné
Pues un librito de tránsito a la edad adulta de una chicuela en un entorno familiar chungo. Sigue un poco los módulos de los cuentos de hadas, con su lugar prohibido, el entorno particular, los personajes misteriosos, el acontecimiento marca un antes y un después … el pack completito. Al final queda en un ejercicio un poco raro en el que aparecen tramas y registros de personajes que no se sabe muy bien qué aportan a la historia. En entrevistas he leído que la autora comentaba que lo publicado es el resultado de un material más largo tras una severa poda. Igual dándole una vuelta al material primigenio el resultado podría haber sido más atractivo. O no.
Niña, mujer, otras – Bernardine Evaristo
Pues historias encadenadas de mujeres vinculadas entre ellas de una manera u otra en diferentes espacios y líneas temporales. Tiene cosas guays (algunas historias) y otras no tan guays (la estructura tiene problemas). Los personajes son casi todos black lesbian women y abundan las historias de superación de la opresión racial y heteropatriarcal, aunque también hay espacios para mostrar que en la trastienda también pasan cosas. Al final todo va encaminado para una revelación final que se supone que es una especie de clímax pero la sensación que queda es que para este viaje no hacían falta tanto entramado adyacente. Le dieron el Booker ex aequo en 2019. Yo me imagino un poco al jurado como a los cardenales cuando hicieron Papa a Juan Pablo the first que cuando terminó el cónclave iban murmurando “la que hemos liado para no elegir al polaco”.
Sumisión – Michel Houellebecq
El argumento quién más quien menos lo conoce aunque sea de oídas porque en su momento armó algo de revuelo (una crónica de cómo los musulmanes toman el poder en Francia vía la autodestrucción de la civilización occidental y sus valores contada por un anodino profesor universitario que podría ser el propio autor).
Qué decir … Está muy bien. Houellebecq es un autor muy potente. Hay quien dice que es un don nadie obsesionado con su propio intelecto y su anodina sexualidad. No tengo opinión sobre lo segundo, pero un don nadie para nada. Leí su primera novela (“Ampliación del campo de batalla”) en francés cuando salió y no me flipó particularmente . De hecho me sorprendió que se hablase de él como una figura polémica y, ya ves tú, contradictoria, total por una novelita centrada en un treintañero con un empleo más o menos bien remunerado aburrido y un poco deprimido porque, o a pesar de que, no folla. Bueno, que divago un poco. Buena mierda. Muy legible, muy de ahora mismo, no tanto por el muslim raise, que también, como por la decadencia de los valores occidentales y sus eventuales consecuencias prácticas.
Señor del Espacio y del Tiempo - Rudy Rucker
Una novelita en tono humorístico sobre unos científicos flipaos que construyen un cacharrico que les permite modificar localmente el valor de la constante de Planck y se convierten accidentalmente en los amos del universo, lo que tiene cosas buenas y menos buenas. Allá por los tres cuartos de libro Dios es mujer trans. Really.
La plaza / Kultur – Pablo Gisbert
Pues si leísteis ‘Mierda Bonita’ pues es un poco más de lo mismo, (parecidos mecanismos y tono), pero se trata de un juguete bonito con dos historias que se leen una empezando por la portada y otra por la contraportada con una edición limitada a mil ejemplares. Muy guay para regalar si sois capaces de encontrar a alguien que le vaya este rollo.
Estoy pensando en dejarlo – Iain Reid
Una chica es llevada por su novio con el que lleva apenas unas semanas de relación a conocer a sus padres.
Una de esas novelas de intriga pchicológica de las que cuanto menos sepas mejor. Como suele ocurrir tiene problemillas y no me atrevo a decir tan siquiera que funcione del todo pero la premisa, la atmósfera y el ritmo inclinan la balanza claramente a favor. En la portada tras el inevitable aviso de “Tendrás miedo, pero no sabrás por qué… “ apuntan que se trata de “la novela en la que se basa la película de Netflix dirigida por Charlie Kaufman” (Sí él). Tras leer el libro la primera reflexión que viene a la cabeza es que se trata de un texto muy poco adaptable al audiovisual. Droja para Charlie Kaufmann. (Continúa en el hilo de los flims)