Corrección política
Publicado: 28 Nov 2005 17:07
Es que nos pasamos de progres y nos volvemos igual de fachas que antes pero habiendo cambiado de maquillaje. Y la situación siempre va un poco a peor, pero como a la gente le mola el nuevo maquillaje, pues se creen que va a mejor, porque luego miran el estilo maquillador de hace ocho años y exclaman: "¡Horror! ¡Qué profundamente antifashion! ¿Cómo nos podía gustar? Con lo que mola el maquillaje de ahora...". Vamos, el mismo perro con otra correa.
Por referirme a algo, iré por el tema de los sexos. La igualdad entre sexos, la paridad laboral, la parida permanente, vamos. De lo único que ha servido la paridad laboral, visto así a bote pronto, es para que en lugar de bastar con un sueldo para mantener a una familia, ahora hagan falta dos. Se deduce que si en cuestión de unos años nos da por hacer currar al niño a los seis años para sacarnos unas pelas extras, pues el siguiente paso será que todas las familias tendrán que poner a currar a los niños a los seis años porque si no no tendrán para comer. Y volvemos al inicio de la Revolución Industrial como quien no quiere la cosa. ¿Pero no éramos modernos? ¿Qué habrá pasado para que se dé semejante retroceso? Le preguntamos al respecto a varios ciudadanos:
R.B.A, editora, opina que la mujer aún tiene mucho terreno por recortar al hombre: "No hay suficiente representación femenina en los bares, y en un país como España en el cual un bar es un centro social, podemos hablar sin temor a equivocarnos de un clarísimo caso de exclusión social y cultural, inadmisible en una época moderna como la nuestra. Quiero ver a mujeres con palillos en la boca, pellizcándose los coños y sacando barriga en las puertas de los bares, soltando desagradables frases sexuales al primer chaval que pase"
Francisco F. B, militar jubilado, está alarmado: "Ahora salen putas por la tele diciendo la tira de cosas malas de los hombres y nadie hace nada. Y no sólo eso, si no que uno ya no puede hablar en público de lo guarra que es su mujer o lo que sea. En mis tiempos si una mujer decía algo malo de su marido o del hombre que fuera, se le partía la cara en público y luego en privado se le daba por culo para que aprendiera modales. Oye, esto no lo estarás grabando, ¿no?"
Le quisimos preguntar a los niños, como en esos programas que los niños dicen tonterías y la gente se ríe. Alejandrito, delincuente juvenil de cuatro años de edad, nos dijo lo siguiente: "Yo a mi chorba me la quiero un montón, pero que no se pase ni un pelo. Yo si le tengo que pegar dos hostias no me corto. ¡Jefe! Otro güisqui doble para mí, y pa la Barbi una agüita pa que no engorde. Bueno, ¿qué te estaba diciendo?"
(igual lo continúo en otro rato, ahora no tengo ganas, jo)
Por referirme a algo, iré por el tema de los sexos. La igualdad entre sexos, la paridad laboral, la parida permanente, vamos. De lo único que ha servido la paridad laboral, visto así a bote pronto, es para que en lugar de bastar con un sueldo para mantener a una familia, ahora hagan falta dos. Se deduce que si en cuestión de unos años nos da por hacer currar al niño a los seis años para sacarnos unas pelas extras, pues el siguiente paso será que todas las familias tendrán que poner a currar a los niños a los seis años porque si no no tendrán para comer. Y volvemos al inicio de la Revolución Industrial como quien no quiere la cosa. ¿Pero no éramos modernos? ¿Qué habrá pasado para que se dé semejante retroceso? Le preguntamos al respecto a varios ciudadanos:
R.B.A, editora, opina que la mujer aún tiene mucho terreno por recortar al hombre: "No hay suficiente representación femenina en los bares, y en un país como España en el cual un bar es un centro social, podemos hablar sin temor a equivocarnos de un clarísimo caso de exclusión social y cultural, inadmisible en una época moderna como la nuestra. Quiero ver a mujeres con palillos en la boca, pellizcándose los coños y sacando barriga en las puertas de los bares, soltando desagradables frases sexuales al primer chaval que pase"
Francisco F. B, militar jubilado, está alarmado: "Ahora salen putas por la tele diciendo la tira de cosas malas de los hombres y nadie hace nada. Y no sólo eso, si no que uno ya no puede hablar en público de lo guarra que es su mujer o lo que sea. En mis tiempos si una mujer decía algo malo de su marido o del hombre que fuera, se le partía la cara en público y luego en privado se le daba por culo para que aprendiera modales. Oye, esto no lo estarás grabando, ¿no?"
Le quisimos preguntar a los niños, como en esos programas que los niños dicen tonterías y la gente se ríe. Alejandrito, delincuente juvenil de cuatro años de edad, nos dijo lo siguiente: "Yo a mi chorba me la quiero un montón, pero que no se pase ni un pelo. Yo si le tengo que pegar dos hostias no me corto. ¡Jefe! Otro güisqui doble para mí, y pa la Barbi una agüita pa que no engorde. Bueno, ¿qué te estaba diciendo?"
(igual lo continúo en otro rato, ahora no tengo ganas, jo)