Tiene carisma, tiene fuerza, tiene retórica. Su programa es una mierda, Italia está estancada y le echa la culpa al euro y se va por la tangente cuando le acusan de fracaso.
Sólo por ilustrar el ejemplo, llamo filocomunista al jefe de la patronal y ex-presidente de Ferrari.
Hace bien en tirar de palabra, de obra no puede presumir.