Redneckensson escribió:Lo único interesante de la puta mierda del black metal es, de hecho, las historias de sus gentes. Y no sólo los de Mayhem y Burzum. Cuéntalo, que da mucha risa.
¿Era de Burzum aquel que retuvo a un turista en una cabaña no sé cuánto tiempo torturándolo?
Coño pues ni idea, pero vamos que podría ser. Bueno, a lo mío:
Varg Vikernes era el líder de Burzum, un tipo un tanto desquiciado, con cierta filia a lo nazi, y profano, en el sentido de que él adoraba a los antiguos dioses escandinavos. En sus ratos libres se juntaba con los amigotes y quemaban iglesias cristianas.
Euronymous era el guitarra de Mayhem, un tipo drogaduzo y satánico; por lo tanto, cristiano, así que las relaciones religiosas entre ambas bandas nunca fueron buenas. Además, Euronymous le debía pasta a Vikernes que nunca le devolvió porque le caía mal.
Un buen día, Dead, líder y cantante de Mayhem, apareció muerto en casa: se cortó las venas pero pronto vio que el proceso de muerte era bastante lento y engorroso, así que escribió una nota en la que puso "Disculpad por la sangre" y se voló los sesos con una escopeta.
Cuando Euronymous llegó y vio a Dead bastante dead, le echó fotos, que usaría posteriormente para la portada de su siguiente disco, y recogió trocitos de cráneo con los que luego se haría un collar.
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Supongo que a estas alturas ya os hacéis una idea de con qué clase de personajes estamos tratando.
Euronymous tendría sus taras mentales, pero no era un tipo especialmente violento. Sin embargo, a Vikernes se le metió en la cabeza que lo quería matar. Era una paranoya de la que no podía huír, de modo que fue a una adivina a que le leyera el futuro. La adivina (vaya otro personaje, por cierto) le dijo que iba a morir asesinado más pronto que tarde.
Vikernes ató cabos: Euronymous lo iba a matar.
Y una polla. Iría a su casa y lo mataría antes de que él lo hiciera.
Cuando Varg Vikernes llegó al destartalado apartamento de Euronymous, éste estaba drogado y en ropa interior. Supongo que entonces Vikernes le contó las nobles intenciones que lo traían hasta su casa y el otro pensó lo mismo: mejor lo mato antes yo, así que fue hasta la cocina a buscar un cuchillo.
La droga y los movimientos rápidos no suelen casar bien, así que Vikernes le quitó el cuchillo. Euronymous corrió entonces hacia otra habitación, donde estaba el rifle que usó Dead para volarse los sesos, pero no tenía munición, así que eludió a Vikernes y se lanzó escaleras abajo en ropa interior.
Ya en la calle, Varg Vikernes lo interceptó, se sacó una navaja del bolsillo y le metió nosecuantas puñaladas. A las pocas horas era detenido por la policía mientras huía en coche.
Lo bonito del asunto es que en una entrevista poco antes de morir, le preguntaron a Euronymous qué le parecía eso de quemar iglesias que hacía Varg Vikernes, y él contestó que pronto sería conocido por un crimen mayor, de modo que sin quererlo ni saberlo, pronosticó su propia muerte.
Y comieron perdices.
