Prosa pubértica.

[Gandalfini]

Sí, yo he sido siempre de verso libre y cuando no toca me arropo de diccionarios, espadas y escudos que me faciliten la tarea. Las fórmulas y estructuras poéticas en su día me costaban horrores, ahora también aunque algo menos, y son más un ejercicio de penitencia que otra cosa. De ahí que también quiera penitencia para los lectores y escriba eso que ves, puro jolgorio infame y chabacanería barata.

A algunos no nos sonríen las palabras como os sonríen a otros. Hay que aceptarlo y asumirlo con modestia.

[Redneckensson]

Yo una vez escribí un soneto. Te lo dedico si te sirve de consuelo.

Soneto I del Tío Teso

En una noche fresca y floreada,
una zagala con curvas de espanto
dijo que mi tranca era un desencanto
y que nunca había estado empinada.

¿Cómo saldría de aquella celada
sin mandarla directa al camposanto?
Reflexioné y utilicé mi encanto.
Con oratoria le di una estocada:

¡Necesitas escuadra y cartabón,
mi nombre es leyenda, soy el Gran Teso!
¡No tendrás jamás mejor revolcón!

¡Que si algo hay tieso, es mi pene grueso!
Y sólo conocerás mi perdón
si pules mi porra con tu sinhueso.



Algún día escribiré la segunda parte, sólo estoy torturando a mis fans con la espera.

Lo de rimar en participio es una bajeza digna de Sabina. Mal.

Después de la crítica, un consejo: que hagan la tijera.

[Stewie]

Yo una vez escribí un soneto. Te lo dedico si te sirve de consuelo.

Soneto I del Tío Teso

En una noche fresca y floreada,
una zagala con curvas de espanto
dijo que mi tranca era un desencanto
y que nunca había estado empinada.

¿Cómo saldría de aquella celada
sin mandarla directa al camposanto?
Reflexioné y utilicé mi encanto.
Con oratoria le di una estocada:

¡Necesitas escuadra y cartabón,
mi nombre es leyenda, soy el Gran Teso!
¡No tendrás jamás mejor revolcón!

¡Que si algo hay tieso, es mi pene grueso!
Y sólo conocerás mi perdón
si pules mi porra con tu sinhueso.



Algún día escribiré la segunda parte, sólo estoy torturando a mis fans con la espera.

Lo de rimar en participio es una bajeza digna de Sabina. Mal.

Después de la crítica, un consejo: que hagan la tijera.

Pues a mí me ha gustado, es sencillo y comparto su mensaje, que no el mal del protagonista ¿también autor?

En todo caso, y no sin antes sumárme a la petición de Redneck, un consejo en verso:

Hacedlo con el gorro puesto
...O de la invención del condón:

Debe, pues, el experto putañero
no dormirse en colchón no conocido;
por no vivir en esto uno advertido
le arrimó unas perennes purgaciones
la Catalana de la calle de Hita.

Huya el diestro costumbre tan maldita;
dé siempre el hurgonazo de pasada,
a Cándido imitando, el gran torero,
que, por lo pronta, es limpia su estocada.

Tú así del soto a casa ve a atacarte:
mas yo quiero del todo asegurarte,
facilitando del condón el uso;
feliz principio a esta artimaña puso
de un fraile la inventiva, que de un fraile
sólo, o del diablo, ser invención pudo.

Iba el reverendísimo cornudo
ardiente, como siempre están los Padres,
por el arroyo Abroñigal al campo
una tarde de sol del mes de enero,
y en un barranco se encontró hecha un cuero
una de estas grandísimas bribonas
que piden el dinero arremangadas.

Del Espíritu Santo a la gran venta
con las Guardias Valonas hubo ido
y bebiéndose azumbres más de treinta
el camino la pobre hubo perdido.

Hallóla el Religioso y enfaldóla
a precio de dos reales que lo fueron
de una misa aquel día en la mañana.

Alzó él sus habitazos cazcarriosos
presentando un mangual como una torre,
y en vez de una belleza soberana
se encontró un miembro femenil podrido,
lleno de incordios, unos reventados,
otros por madurar, otros maduros,
sobresaliendo el clítoris llagado
sin un labio y pelado a repelones;
colirios de las séptimas unciones
con cicatrices, churre y talpapismos;
de hediondo aliento y corrompido podre;
sucio de parches, gomas y verrugas,
cuantiosas y abundantes purgaciones,
que inundaban de peste la entrepierna,
pringando de materia las arrugas
de la muy puerca tripa renegrida.

Quedóse el fraile como si escondida
víbora hubiera hallado en su alpargata;
haciendo cruces de volverse trata,
porque el convento no se escandalice,
aunque no hay cirujano que no dice
que las bubas están en los conventos;
mas tal era la indómita lujuria
del sumamente Reverendo Padre,
desvirgador mayor de su colegio,
que discurrió enebrarlo sin injuria
de su miembro, y quitando prontamente
de la cabeza, astuto, la capilla:
«Si son las bubas multitud viviente
de insectos minutísimos y tiernos
como sienten los físicos modernos,
porque el mercurio a todo bicho mata,
la comunicación evitar quiero,
haciendo escudo de la ropa santa»
dijo, y calando a modo de sombrero
en su bendito miembro la capilla,
así lo mete. La pobreta chilla,
no enseñada a tan rígida aspereza.
Acabó el fraile y ve que se endereza
la comunidad toda hacia aquel puesto,
y por no dar ejemplo de inmodesto
se pone la capilla que chorrea,
jabonando el cerquillo y la corona,
blando engrudo, simiente de persona.
Así el gran D. Quijote en ocasiones
contra el casco exprimió los requesones
que el buen Sancho en su yelmo hubo guardado.
El condón de este modo fue inventado;
después los sutilísimos ingleses,
filósofos del siglo, le han pulido,
y a membrana sutil le han reducido,
que las almendras lo conservan fresco
con el aceite que destilan dulce;
y las putas de Londres son multadas
si no ofrecen bandejas de condones,
que les hacen venir desde la China,
y en Montpellier se venden a paquetes,
y en las tiendas de Pérez y Geniani,
si los pagares bien y con secreto,
y por los Secretarios de Embajada,
que a la nuestra remiten las naciones.

(extraído de Nicolás Fernández de Moratín, "El Arte de las putas", 1769)

[Shiz]

Dos semanas entre mortales y me pesan como toda una eternidad. He descubierto una nueva lacra humana que implacablemente se está apoderando de mí: la nostalgia.

Conscientemente he eludido taponar mis oídos esta noche; procuro impregnarme de cada uno de los sonidos que dan ritmo a esta calurosa madrugada al compás que marcan mis perecederos latidos. Cada soplo de brisa que se cuela por la ventana araña mi torso desnudo, insuflándome la cantidad justa de vida para hacer soportable mi liviandad.

Una noche más, mis insaciables vecinos han vuelto a insultarse con la lascivia y lujuria con que me tienen habituada; alcanzando el clímax y derrumbándose extenuados una y otra vez hasta agotarme. Los ecos nocturnos de la ciudad sostienen ahora mi inmundo Universo, cimbreándome en el fatuo congojo de quien se siente desamparado y vencido.

- Estás llorando de nuevo, mi Reina.
- Llorar es humano, y ahora lo soy. Tú nunca podrás entenderlo -susurré.

La debilidad y la tristeza me acunan en un estado de plácida inconsciencia; me empapo de la risa de las estrellas en un vals de penumbras. Pronto me sorprenderá el Astro Rey y olerá a mañana recién hecha; el bermellón del alba rasgará la oscuridad de Oriente perezosamente, alentándome a que me enfunde el alma para recibir al nuevo día.

Apuro el tácito baile en un último trago letal; abrazada a los quejidos aterciopelados del violín, palidezco ante un vendaval de añoranza desmesurada que me va consumiendo.


El amanecer es ya una certeza. El trazo leve de mi sonrisa se difumina tornasolado.


[13/02/2009]

- Hera, despierta, es muy tarde. Recuerda que hoy te acompaño al médico, no puedes seguir así.

Molly entró en el baño y abrió el grifo de la ducha dejando correr el agua.

- ¡Vamos Hera, perezosa! Llegaremos tarde, y hoy no aceptaré ninguna excusa -aseveró.

Sin obtener respuesta, Molly entró al dormitorio dispuesta a sacar a su amiga de la cama. La palidez que la envolvía le resultó extraña y, al tocarla, le quemó su gelidez.

- ¡¡Dios mío!! ¡¡¡¡Ricardo, ayúdame!!!! ¡¡Está muerta!! -gritó Molly aterrada corriendo escaleras abajo.
- ¿Qué dices? Tranquilízate, no puede ser: estará de resaca.
- Está muerta, Ricardo. Hay que llamar a la policía -dijo Molly entre sollozos.
- Déjate de policía; me clausuran el chiringuito por insalubre -espetó Ricardo-. Subamos antes a asegurarnos.


Sobre la cama de Hera, ahora vacía, encontraron una nota: "Recoge los cristales rotos de tus ojos y sonríe, Molly. Estaré siempre a tu lado".

[The last samurai]

¿¿¿WTF???

[PrimeroDerecha]

Que vergüenza.
Ni una teta.

[Diente]

Tus lectoras quieren pan y circo, ¿oyes? Tetas, pan y circo.

[Redneckensson]

Ha muerto virgen, como un angelito. O la de Camino. O el foro en pleno, cuando llegue la hora. Que esto os sirva de lección para cuando acabe Perdidos y al final resulte que todo ha sido el sueño de una pesada digestión del puto gordo.

[dunker]

[Stewie]

Buen final, la tijera había creado tanta expectación que es casi imposible que no decepcionase, a no ser que fuese acompañada de una ilustración. Y siendo tú tan humilde y reservada, posar sáficamente encarnando un Diosa pues claro, no era plan. Si lo entiendo.

Con todo, es un final digno e inesperado.

Bona feina.