Silvia
Publicado: 19 Jul 2005 12:29
Dedicado a Don Monty
Silvia me suena a un viento fresco silbando entre los bosques. Me suena a las moras negras silvestres que nacían en las cunetas y dejaban manchas indelebles en los vestidos.
Silvia me suena a ojos oscuros y labios rojos sonrientes, a vestidos frescos y claros, a sensualidad sin querer, a sudor fresco de juventud.
También me suena a las solitarias noches ardientes susurrando tu nombre con la voz enronquecida, a besos en el rio, a amistad inquebrantable entre dos niños que quizá ya no lo fueran tanto.
Cuando me dijiste tu nombre, Silvia, me quedé estupefacto. Porque Silvia para mi sólo hay una y es aquella que encontré y perdí, y si te llamo Silvia la invoco a ella, que se antepone, y sólo puedo verla a ella, y olerla a ella, y tus ojos verdes Silvia, aunque están llenos de hojas de los árboles, jamás serán los ojos oscuros como un pozo de Silvia, donde sabía que anidaba mi reflejo aunque nunca lo llegué a ver.
Lo siento, si te llamaras Nuria, Laura, Alicia, quizá pudiera olvidarla.
Pero te llamas Silvia.
Silvia me suena a un viento fresco silbando entre los bosques. Me suena a las moras negras silvestres que nacían en las cunetas y dejaban manchas indelebles en los vestidos.
Silvia me suena a ojos oscuros y labios rojos sonrientes, a vestidos frescos y claros, a sensualidad sin querer, a sudor fresco de juventud.
También me suena a las solitarias noches ardientes susurrando tu nombre con la voz enronquecida, a besos en el rio, a amistad inquebrantable entre dos niños que quizá ya no lo fueran tanto.
Cuando me dijiste tu nombre, Silvia, me quedé estupefacto. Porque Silvia para mi sólo hay una y es aquella que encontré y perdí, y si te llamo Silvia la invoco a ella, que se antepone, y sólo puedo verla a ella, y olerla a ella, y tus ojos verdes Silvia, aunque están llenos de hojas de los árboles, jamás serán los ojos oscuros como un pozo de Silvia, donde sabía que anidaba mi reflejo aunque nunca lo llegué a ver.
Lo siento, si te llamaras Nuria, Laura, Alicia, quizá pudiera olvidarla.
Pero te llamas Silvia.