Algo puede estar cambiando en Latinoamérica... o no.
Publicado: 08 Sep 2005 13:56
Castro y Chávez dan un paso más en su proyecto de integración regional
Los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y de Cuba, Fidel Castro, fueron de nuevo protagonistas de la segunda cumbre de Petrocaribe, celebrada el 5 y el 6 de septiembre en la ciudad jamaicana de Montego Bay, en la que Venezuela firmó diversos acuerdos energéticos y cartas de intención con una decena de países caribeños.
Por medio de Petrocaribe, Venezuela suministrará petróleo a precios preferenciales y con facilidades financieras a 13 países caribeños, como parte del esfuerzo por afianzar en la región la denominada Alternativa Bolivariana de las Américas (ALBA), el plan integracionista que impulsan Chávez y Castro para contrarrestar la influencia de Washington en el hemisferio.
El petróleo venezolano y la medicina cubana son los principales pilares del proyecto.
"Tenemos la oportunidad de romper con el camino impuesto por la dominación y el servilismo", dijo Chávez a los mandatarios asistentes a la cumbre. Entre ellos estaban el primer ministro de Antigua y Barbuda, Baldwin Spencer; el mandatario de República Dominicana, Leonel Fernández; el primer ministro de St. Kitts y Nevis, Denzill Douglas; el presidente de Guyana, Samuel Hinds; el primer ministro de San Vicente y Granadinas, Ralph Gonsalves, además de los responsables políticos de Belice, Surinam, Granada y República Dominica. Con todos ellos Chávez suscribió acuerdos bilaterales en materia energética.
Durante la cumbre, el presidente venezolano aseguró que Petrocaribe contribuirá a la "seguridad energética" de la región.
El convenio establece que si el precio del barril de petróleo es superior a 50 dólares, como ocurre actualmente, los países firmantes podrán realizar un "pago diferido" del 40 % de la factura, con plazos de hasta 25 años y un 1% de interés.
Petroamérica
Chávez dijo que Petrocaribe es la "primera etapa" para el surgimiento de Petroamérica, una gran alianza energética regional que pretende apuntalar "la integración y la unidad" entre los pueblos latinoamericanos.
El martes, en la sesión de clausura de la cumbre y a solicitud del presidente venezolano, Castro se dirigió a los asistentes y se refirió a los programas de salud y a los planes de contingencia contra huracanes y catástrofes que se desarrollan en Cuba para preservar vidas y recursos.
Chávez propuso que los países que reciben beneficios del financiamiento de Petrocaribe destinen un porcentaje del mismo, aunque sea modesto, a tales fines.
Además, llamó a ser consecuentes con la propuesta cubano-venezolana de integración, basada en la cooperación y en la solidaridad, frente al modelo neoliberal que propugna Washington con el Acuerdo de Libre Comercio para las Américas (ALCA).
Castro y Chávez, principales promotores del ALBA, se han comprometido a formar juntos en universidades de ambos países a 200.000 médicos latinoamericanos y caribeños de modo gratuito, así como a atender a seis millones de pacientes de la región con problemas de la vista.
Uribe, dispuesto a aceptar que en Colombia existe un conflicto armado
El presidente colombiano da un viraje "en aras de la paz"
El presidente colombiano, Álvaro Uribe, sigue sorprendiendo con sus ofertas a la guerrilla para facilitar el camino a los diálogos de paz. El martes le dijo al Ejército de Liberación Nacional (ELN), el segundo grupo guerrillero del país, que estaba dispuesto a reconocer que existe un conflicto armado en Colombia, si ellos aceptan un cese de hostilidades como paso previo a una negociación.
Uribe hizo estas declaraciones un día después de que este grupo guerrillero entregara el cadáver del político Ancizar López, a quien mantuvo secuestrado durante tres años.
"Depondría mis personales convicciones y, en aras de la paz, aceptaría que hay que negociar la solución definitiva de un conflicto", afirmó en una ceremonia militar. Para Uribe en Colombia no existe conflicto armado, sino una amenaza terrorista. "Si se da una señal de paz creíble al pueblo colombiano, yo no tengo inconveniente en ceder ese punto".
Con ese ofrecimiento los elenos se quedan sin uno de los cinco argumentos para rechazar la oferta de un pre-diálogo propuesta recientemente por la Iglesia a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el ELN y avalado por el Gobierno.
Curiosamente, Uribe no se refirió a la entrega del cadáver del ex gobernador y ex congresista, secuestrado desde abril de 2002, que ha sido considerada el último acto de cinismo del ELN. Sólo una vez en estos tres largos años la familia recibió pruebas de supervivencia: en diciembre del 2002, cuando enviaron una fotografía del político entre los fusiles de dos guerrilleros y en la selva.
El político, que cumplió en cautiverio los 80 años, murió, al parecer, por causas naturales —insuficiencia renal—, hace 11 meses. La captura de un jefe guerrillero facilitó la entrega del cadáver. Se sabe que, como es común en la práctica de este delito, la familia siguió siendo extorsionada después de la muerte de López.
"Accidente del conflicto
En la bolsa en la que entregó a la Cruz Roja los despojos mortales del que era considerado un patriarca de la clase política de la zona cafetera, el ELN envió una nota en la que califica el hecho como un "accidente del conflicto".
Hace apenas tres semanas, el grupo guerrillero asesinó a dos sacerdotes y pidió perdón por lo que llamó "una equivocación". El diario El Tiempo dijo ayer en su editorial que "el ELN ha dado una muestra de crueldad y de cinismo difícil de igualar. ¿Quién puede creer en su voluntad de evitar errores?".
Y ayer la Corte Suprema de Justicia dio el visto bueno a la extradición de Don Berna, líder paramilitar acusado por una Corte de Nueva York de narcotráfico y lavado de dinero. El pasado 27 mayo, Don Berna se entregó a la justicia tras un amplio operativo que buscaba su captura por el asesinato de un político.
Ya se oyen voces que piden al Gobierno que se abstenga de extraditar a Don Berna. Si esto ocurre, dicen algunos, sería un duro golpe para el proceso de paz con estos grupos. El presidente decidirá en última instancia si le envía o no a rendir cuentas ante la justicia de EE UU.