Página 1 de 1

¡Qué viene Valdez!

Publicado: 15 Abr 2004 21:32
por Carmelo
Magnífica. Magnífica, qué palabra. Se te llena la boca de letras.
Otra vez: Magnífica. Bueno.

Valdez es la ley. El sheriff de Noria. Ojo, de la parte mejicana de la ciudad. Cuidao.

Soplagaitas borrachuzo, don nadie, pintamonas, monigote sin sustancia. Alguacil segundón del otro sheriff (el de la parte gringa de la ciudad, se entiende). Una sombra sin pasado, un tío acabao. El hazmerreír.

Pero amigo, el alguacil gringo hoy no está. Anda de viaje.

Las fuerzas vivas dispuestas a cometer un linchamiento. Hijos de puta. Se trincarán a un negrata forastero. Para cargarle un crimen del que era inocente. Gente mala, muy mala.

Una viuda india preñada. Un viejales bueno.
Un ricachón sin entrañas capaz de enviar a la muerte a su lugarteniente para beneficiarse indiscriminadamente a su mujer (la de el otro, no la suya, que él carece de esposa). El muy canalla.

Ella es Susan Clarck. En sus años mozos. No la de Webster, que te veo (ya sabéis el microbio aquel repelente).

Valdez a intentar poner orden. Es la ley. Una compensación para la viuda. Se cachondean. Le dan unas hostias. En fin, lo dejan hecho un nazareno.
Jolines, si hasta le crucifican. Con cuerdas, en un detalle de humanidad. Y venga cachondeo.
¡Por el amor de Dios! ¿No tienen respeto por nada?
Ellos el ciento y la madre, Valdez más solo que la una. Coardes.

En una cabaña mísera y maloliente se abre un baúl. Una vieja fotografía de tiempos mejores, un uniforme enmohecido del ejército mexicano (jeje, llevaban unos sobreros muy graciosos los soldaos esos).
También sale un peazo fusil que más que fusil es un cañón. Se va a preparar parda.
Y por sus santísimos cojones lo van a pagar muy caro. ¡Qué viene Valdez!

“Diles que viene Valdez” serán las últimas órdenes que reciba un joven (y ya alopécico) Hector Helizondo (sicario del malo malote).
De ahí a plantarse en la siniestra guarida y pillar de rehén a la Susan Clarck un visto y no visto. Ahora no se cachondean tanto.

Lo demás hay que verlo. La persecución, la caza, el cielo, las piedras, ese sabor a tierra. Toda la jauría contra Valdez. Y el pedazo de fusil.
Al recordarla se me ponen los pelos como escarpias. Eso sí es una película épica y no otras moñerías de ahora.

Añadir, por si fuera poco, que ofrece planos muy sugerentes de la Susan Clarck en picardías, cabalgando melena al viento (sobre una mula, creo). Eso no se paga con dinero.

Ah, ¿Valdez? Un otoñal Burtlancaster. Claro. También puede hacer de mexicano. ¿Entonces? Pues eso.
Tal vez uno de los filmes más impresionantes de la historia entera de la humanidad. Tal vez. Digo. Nada más y nada menos.

Como dato curioso citar que la mayoría de los personajes masculinos, Valdez, los malos, gente que pasaba por allí inclusive, lucen sendos mostachos en formatos diversos. Curioso. Pienso.

Publicado: 16 Abr 2004 11:45
por curreta
Grande.

Publicado: 17 Abr 2004 17:34
por Carmelo
Si es que el Valdez este es muy grande. Menudo. Claro.

Bueno. Tengo que rectificar algunas cosillas. Es que he puesto letras de más. Algunas. Debido a la emoción del momento. Quiero pensar.

Donde se dice Susan Clarck hay que pensar que se dice Susan Clark. Esa c pequeña de en medio no viene a cuento.
Otra cosilla ¿Hector Helizondo? No, hombre, no. Helizondo no, Elizondo (sin “H”).
¡Madre mía! Qué picia más gorda.

Me recuerda una cancioncilla:

“Elizondo, Elizondo, Elizondo,
el sombrero me lo quito y me lo pongo…”

Aunque igual no era así. No recuerdo bien.

Lamento profundamente estas imprecisiones tan poco exactas. Lo he arreglao como he podido. Eso sí. A mi entender.
Espero que eso de idea de mi buena fe.