El hijo
A veces fantaseo con combinaciones imposibles en las que un director genial, uno de mis favoritos, o con verdadera habilidad distintiva, toma un proyecto con el que jamás se atrevería. Es el caso de Brightburn, que después de verla (quizá incluso mientras la veía) me hacía pensar: "Esta historia la coge Lars Von Trier (¡pero qué dices, loco!) y te hace un peliculón".
La idea y la historia están muy bien. Básicamente cuenta que tuvimos suerte de que el Supermán que llegó a nuestro planeta fuera de los buenos. ¿Qué habría pasado si viniera de un planeta donde envían a sus cachorros a conquistar otros mundos?
Tiene momentos visual y emocionalmente impactantes, pero la cosa se queda un poco a medias, con un tono de película demasiado comercial y poco atrevida, que podría haber llegado más lejos. Para dejar claro lo malo que es el chiquillo incluye un par de escenas un tanto gore (cuidado con la escena del ojo) que siguen sin saber a mucho.
Curiosamente lo más atrevido llega durante los títulos de crédito, un detalle que deja con cierto buen regusto, pero un regusto de lo que podría haber sido en otras manos.
Nota:
6.
Lo primero, la nota, para que quede claro cuánto me gustó: un
8.
No cuenta una historia especialmente impactante y novedosa (unos forajidos a sueldo de un comodoro que salen en una nueva misión, a cazar a un hombre). Lo importante es todo lo demás. Una ambientación cuidada al detalle (el sonido de las pistolas, los paisajes, la iluminación natural, los escenarios, las calles embarradas...). Unos personajes muy humanos, nada típicos, con motivaciones muy claras y creíbles. Una muy buena banda sonora. Ritmo que atrapa, aunque hacia la última parte quizá se alargue un poco si no estás muy entusiasmado con ella.
Una película que emociona, que habla de sentimientos y sensaciones, más que de aventuras en el Salvaje Oeste. Y cuidado con el trailer, que por momentos la hace parecer una comedia.
Ying/Shadow/Sombra
Película de Zhang Yimou, director que nunca falla, autor de Hero, La casa de las dagas voladoras, Tigre y Dragón... [Edito: el director de Tigre y Dragón es Ang Lee] Películas épicas de chinos realizando proezas de artes marciales con una gran sensibilidad en la historia, las interpretaciones y el ritmo.
No es que aporte grandes novedades respecto a sus anteriores películas pero es que es tan obra de arte que se le perdona todo. Todo está cuidado al máximo: el vestuario (que refleja un enfrentamiento entre la luz y la oscuridad, el blanco y el negro), la fotografía (quizá más oscura y gris que anteriores películas), las coreografías de artes marciales, la trama, los escenarios, las armaduras... Un deleite tanto para amantes de las películas de artes marciales como para los estetas del séptimo arte.
Cuenta la historia de una "sombra", un hombre que se hace pasar por un comandante que quedó malherido en un duelo, y que ahora vive oculto en la oscuridad. Les une una extraña relación de protección-fidelidad. El comandante quiere entrenar a la sombra para que venza en duelo a quien le hirió, y de paso conquistar la ciudad.
Esta escena de la reconquista de la ciudad tiene momentos un tanto increibles. Los atacantes usan como arma sombrillas metálicas que disparan cuchillas, lo cual, si bien en cierto modo es bastante chulo, da lugar a escenas que te sacan un poco de la película.
De todos modos, una película estéticamente excelsa con momentos bellísimos de lucha y una historia que te mantiene interesado hasta la última escena.
Nota:
7
Un lugar tranquilo
No hagas ruido que vienen los monstruos lol
(Ya me he cansado de escribir como un crítico).
La Tierra ha sido invadida por unas criaturas que te darán caza en cuanto hagas el más mínimo ruido. Los protagonistas son una familia que sobrevive en silencio, hablando en lengua de signos y tomando todas las precauciones posibles.
La película apunta muy buenas maneras pero, para mi gusto, tiene un final un tanto inconcluso que arruina un poco la experiencia, pero al menos te deja la sensación de que has escogido bien y no has perdido el tiempo.
No provoca terror, sino más bien tensión, y lo que más provoca esto no son los monstruos, sino un elemento físico en concreto que no voy a decir. El que la haya visto probablemente ya sabe a qué me refiero.
Muy buena idea y buena historia, buena realización pero sabe a poco al final.
Nota:
6.