No os preocupéis por mí: soy mujer, pero apollo los derechos de los maricones del culo como vosotros dos, y me comprometo a tocar la pandereta con solemnidad mientras sus hundís y sus devoran las carpas
No quiero que os pongais tristes si morimos ahogados en el retiro. Pensad en la belleza efímera del Hindenburg mientras caía al suelo envuelto en llamas, con ese dramático efecto seremos engullidos por las profundas simas del estanque mientras brillamos con nuestra luz propia. Regocijaos al imaginar nuestros pálidos traseros cubiertos de limo, y nuestras profundidades más estigias profanadas y sirviendo de morada a las dulces carpas. Nuestras moles pudriéndose lentamente y liberando todo el hamorio acumulado tras años y años de estancia en el pH. Finalmente, cuando la podredumbre rasgue el tejido de nuestros escrotos, nuestra semilla quedará libre y flotará hacia la superficie, explosionando al contacto del aire, y anegando en espermaceti a toda la población del Parque. Las doncellas, sus madres y sus abuelas quedarán encintas espontáneamente. Nacerán niños, deformes, orondos, gordos y repulsivos por doquier. Los nenúfares abrirán en flor y los pájaros graznarán en éxtasis mientras caen muertos por centenares.
Así será, será un día de fiesta. Una celebración de la vida y del hamor.
Entonces que... KKD?